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FINDING... Una excursión por la Ribeira Sacra ourensana

findingalicia
27 may 2015
2 Min. de lectura

Nuestra propuesta está pensada para un fin de semana en la Ribeira Sacra y casi por completo se centra en la provincia ourensana. De hecho, el lugar que recomendamos para situar la base es Parada de Sil, un pequeño pueblo lleno de encanto a orillas del río que le da nombre y en el que son diversas las opciones de alojamiento: camping, casas rurales...

Dentro de este municipio, te aconsejamos visitar Santa Cristina de Ribas de Sil, un monasterio benedictino actualmente en desuso que se encuentra rodeado de un inmenso castañar.

Santa Cristina de Ribas de Sil-Ribeira Sacra

A continuación, coge el coche y acércate a los Balcones de Madrid. Si lo tuyo es la fotografía, desde los 500 metros de altura desde los que se asoman podrás hacer algunas de las mejores instantáneas de las gargantas del Sil.

Una vez te hayas repuesto del vértigo, y siguiendo nuestro plan, es el turno para que conozcas los vinos de la zona: la denominación de origen Ribeira Sacra. Son muchas las bodegas que riegan la zona, y en ellas te explicarán su sistema de producción casi completamente manual, dado que los cultivos se asientan en pronunciadas laderas a las que es imposible que accedan las máquinas.

Quizá este carácter heroico de la viticultura local ha contribuido a la buena puntuación que reciben sus caldos en listas tan prestigiosas e influyentes como la Parker. Una de las bodegas que destacan en este boletín es Algueira, en la localidad lucense de Doade, situada prácticamente en el límite con la provincia ourensana.

Tras conocer la elaboración del vino y probar unos cuantos ejemplares, ya es hora de comer. Si finalmente Adega Algueira es tu elección, allí mismo podrás disfrutar de ricos manjares y también contratar un paseo en barco por el río Sil.

De vuelta hacia Parada de Sil, haremos una parada en Castro Caldelas, a apenas unos 15 kilómetros de Doade. Su símbolo más emblemático es su castillo de origen medieval. Visitable todos los días del año, en su interior acoge un museo arqueológico y etnográfico. Piérdete por el casco histórico de esta pequeña villa y no marches sin probar su famosa bica, un riquísimo bizcocho mantecado.

Ya el domingo, el monasterio rupestre de San Pedro de Rocas, en Esgos, te sorprenderá, pues está totalmente excavado en la piedra. A continuación te espera el Parador de Santo Estevo de Rivas de Sil, en Nogueira de Ramuín. Su monasterio, su iglesia y, como no, su restaurante, en un maravilloso entorno natural, son el broche final perfecto.